Estoy son días para reflexionar sobre cuál
es nuestra relación con la muerte, con las perdidas, con lo que se termina, con
lo que ha cumplido un ciclo.
No solo las personas mueren, también lo
hacen las relaciones, los trabajos, ciertas etapas de la vida, forman de pensamientos
y hasta hábitos y costumbres pueden morir en cualquier momento ¿Cuál es nuestra
forma de enfrentarnos con ese “fin” de algo?.
La muerte hace que nuestros miedos más
profundos afloren a la superficies y el mayor de todo es el de no existir. Pero
nuestro mayor miedo no es la MUERTE. Nuestro mayor miedo es arriesgarnos a
estar completamente vivos expresando lo que realmente somos.
Se necesita ser un guerrero espiritual
para despertar del miedo más profundo. Y como el ave fénix que renace de las
cenizas, elevarse con sabiduría y fuerza, creando luz para alentar e inspirar a
otros a salir de su propia oscuridad. Y para eso necesitamos soltar, dejar ir
lo que ya no somos.
La muerte no es el fin de tu Ser, es
solo abandonar ese cuerpo que habitaste por muchos años, es un cambio, una transición
de oruga a mariposa. Hay que seguir avanzando, hay que crecer, hay que procurar
reunir mayor calidad de luz porque para eso hemos venido… para abandonar el
planeta como serás luminosos, muchos más crecidos que cuando llegamos.
Te propongo meditar acerca de la muerte
y tu relación con ellas. Honremos también a los que han partido, a nuestros
antepasados, con el respeto que merecen quienes nos llevan camino adelantado.
Siempre nos protegen y nos guían, su sangre corre por nuestras venas, su
recuerdo están en nuestra alma y su espíritu vive en nuestros corazones.
Al final, todos vamos haciendo nuestro
camino a casa con la luz del corazón. Muchas veces nuestras luz se apagara.
Pero otra luz, la de un extraño o un amigo, un libro o una canción, un pájaro o
una flor silvestre, se acerca lo suficiente para que podemos ver nuestro camino
con su luz. Y con el tiempo nos damos cuenta de que esa luz siempre fue nuestra
propia luz.
Es desde ZONA LUZ CITY.
No hay comentarios:
Publicar un comentario